sábado, 12 de noviembre de 2011

NO HAY DOS SIN TRES

En una soleada y hermosa tarde de Mataderos, este Nueva Chicago comandado por Mario Franceschini recibía a su par de Almagro. El equipo de Jose Ingenieros venia con un plus: en el banco estaba ni mas ni menos que Mario Finarolli, el recientemente entrenador del Verde. Muchas cosas para ver en este partido. ¿Tendria la receta justa el tecnico rival por haber armado este plantel? ¿Estaria al tanto de las modificaciones tacticas y mentales que el actual DT le impuso al equipo? La pelota empezaba a rodar. Recien ahi esto se podria develar.
Los primeros minutos del partido tuvieron a un Chicago erratico, bastante peleado con la pelota. Se extrañaba mucho a Serrano, Bochi poco podia hacer con la pelota y Gomito casi no tenia contacto con la misma. Del otro lado, la visita mostraba algunos indicios de una mentalidad ofensiva. Tanto fue asi que a los 13 minutos de juego un zapatazo de German Lanaro de algo mas de 30 metros no pudo ser tapado por Drago y Almagro se puso uno a cero. Con poco el Tricolor era mas y ya estaba en ventaja.
Desde ese momento, por logica, empezó otro partido. Chicago iba, iba y seguia yendo, mientras que la visita aguardaba con inteligencia, sin desesperarse y listo para contra-atacar en cualquier momento.
No se caía una idea entre los del Verde, pero la idea de dar vuelta la situacion estaba, desde la voluntad de Damian Lemos que tiene un presente brillante, y tambien desde la entrega constante de Gomito y Carboni, que nunca dieron una pelota por perdida.
Cuando se cerraba el primer tiempo y todo hacia indicar que se iba a complicar romper las lineas en el complemento, un corner del 10 fue excelentemente efectivizado por el juvenil Emiliano Lago, el arquero Centenero llegó a taparla pero no pudo evitar que la pelota ingrese en su arco. Era el empate y el delirio absoluto en el Estadio Republica de Mataderos. La cosa ahora era otra: en los segundos 45 minutos se podia ganar. Chicago TENIA que ganar.
En el comienzo de la segunda etapa la visita estaba decididamente parado de contra, y el gran desafio de los de Franceschini era poder romper con ese esquema defensivo.
Desde los primeros minutos se sucedian las embestidas del Verde, intercaladas por alguna que otra contra de Almagro, pero las cosas estaban orientadas a que el triunfo llegue.
El momento en el que el DT se decidió a poner mas peso en ataque, con el ingreso del ya recuperado Alfaro, fue el mismo en el que Matias Escudero sufrio un golpe y debio dejar el campo de juego. Asi entonces salieron el defensor y Vinaccia (de aceptable partido) e ingresaron Juanjo Barreña y el mencionado delantero. Chicago iba por el gol y los tres puntos.
Tanto fue el Verde que, tras una serie de rebotes, el colombiano Ramirez metio el centro "a la olla" con su pierna derecha (el lateral es zurdo), el mismo fue capturado por Gomito que la bajo de cabeza y fue Leo Carboni quien la mando adentro. El Verde estaba arriba y el cordobes marcaba por segunda fecha consecutiva y a su vez su segundo tanto en el torneo. El 9 verdinegro de a poco va devolviendole con goles la confianza que el tecnico deposito en el.
El resto del juego tuvo algunas chances para el dueño de casa mientras que la visita intentaba mediante pelotazos y algunas pelotas paradas. Nada pudieron hacer los hoy dirigidos por Mario Finarolli y los tres puntos quedaron en Mataderos.
El equipo sigue creciendo como tal y ya llegamos a 22 puntos. Con tranquilidad y paciencia. Tambien con trabajo. Vamos Verde de mi vida, que todavia se puede...

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