Un festejo que llega en medio de una fuerte crisis que, por suerte, parece estar en su etapa final de recuperación. Mas allá de la nefasta situación futbolistica (teniendo en cuenta el pasado reciente), no se puede dejar de destacar que el club se está sanando lentamente desde lo político/económico. Que el Estadio es cada vez por mas diferencia el mejor de la categoría. Y esto ultimo, en gran parte, gracias al aporte del socio/hincha que, al menos, desde su cuota social mensual no deja de demostrar su amor por los colores, por la camiseta y por toda la tradición que envuelve a la historia de Chicago. Una historia que seguramente tenga mas capítulos nefastos y tristes que los que fueron triunfales, pero sin lugar a dudas siempre estuvo y estará día a día en cada hincha esa alegría innata que se tiene por el simple hecho de amar estos colores.
Hablar de anécdotas o recuerdos seria caer en la nostalgia. Pero no, hoy tiene que ser un día de fiesta. El comienzo de la gran fiesta que serán estos 365 días que se van a recorrer de cara al Centenario. Siempre con ese gran/único objetivo que todos tenemos: Festejar las 100 primaveras verdinegras con el club en la Primera B Nacional.
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